El Estado garantiza que el viaducto del TAV respeta al río Ulla y a los bancos marisqueros

La construcción del viaducto sobre el río Ulla para favorecer el paso del Eje Atlántico del Tren de Alta Velocidad (TAV) no va a perjudicar al cauce fluvial ni a los bancos marisqueros de la ría de Arousa. Así lo mantiene el Estado central, y así lo transmite el subdelegado del Gobierno a los representantes de las cofradías arousanas.
Los informes que obran en poder el Ministerio de Fomento incluyen minuciosos estudios elaborados por expertos y científicos –incluidos los emitidos por las Universidades de Vigo y Barcelona– según los cuales la calidad del agua está garantizada gracias a las medidas preventivas puestas en marcha.
Así quedó puesto de manifiesto en la reunión mantenida ayer en Pontevedra, donde el subdelegado, Delfín Fernández Álvarez, quiso tranquilizar a los portavoces de los sectores productivos, entre los que se encontraban el presidente de los parquistas de Carril, José Luis Villanueva; el patrón mayor, Fernando Franco; su homólogo de Rianxo, Baltasar Rodríguez; y el presidente de la Federación Gallega de Cofradías, Benito González. Este último indicó tras la reunión de ayer que "si se mantienen los criterios preventivos actuales, y si seguimos adelante con las reuniones de seguimiento, actuando siempre con seriedad, los sectores productivos podemos sentirnos tranquilos".
Lo que hizo ayer el subdelegado "fue informarnos detalladamente de la situación actual y de cómo avanzan las obras –continúa el presidente de la Federación Gallega–, y según los estudios realizados parece que , al menos de momento, tanto el río como los bancos marisqueros gozan de buena salud y no se han visto afectados por los primeros trabajos realizados".
La conclusión, según Benito González, es que "los sectores productivos podemos estar tranquilos, aunque sin bajar nunca la guardia y velando para que sigan aplicándose todas las medidas preventivas anunciadas", tales como las barreras antiturbidez o la boyas y/o turbidímetros que, aguas abajo, vigilan cualquier posible afección en el Ulla.
A su vez, desde la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra manifiestan que tras los estudios técnicos llevados a cabo para determinar el posible impacto de las obras del viaducto sobre los bancos marisqueros "la conclusión a la que podemos llegar es que ese impacto va a ser nulo, de aquí que se garantice la calidad del río y de la producción marisquera de la ría".
El hecho de que se celebrara la reunión de ayer y que esté previsto mantener otros encuentros periódicamente, se debe a la ubicación estratégica del viaducto, que a lo largo de 1.620 metros va a cruzar el Ulla entre Abalo (Catoira) e Isorna (Rianxo). Aguas abajo se encuentran los conocidos como Os Lombos do Ulla, es decir, los bancos de libre marisqueo más importantes de Galicia. Y junto a ellos están los parques de cultivo de Carril y la desembocadura del río en la ría de Arousa, con lo que ésta también puede verse afectada en caso de detectarse problemas constructivos.
De ahí la importancia de las medidas preventivas adoptadas. Sin ir más lejos, cuando el Ministerio de Fomento adjudicó la construcción de este viaducto, con un presupuesto de 105 millones de euros, ya advirtió de que "en el diseño de la estructura se ha cuidado especialmente la integración en el entorno, buscando la transparencia y el equilibrio de formas en consonancia con la suavidad del paisaje".
Además, "con la distribución de las luces del viaducto se evita la afección a la vegetación de ribera, incluyéndose las medidas pertinentes para el control en todo momento de las aguas del río".
Al mismo tiempo, el Gobierno central señala que "se ha previsto la restauración paisajística del entorno, especialmente en el espacio natural de la laguna Pedras Miúdas, en Catoira".

Los análisis dicen que las aguas gozan de buena salud, al menos de momento
La construcción del viaducto sobre el río Ulla para favorecer el paso del Eje Atlántico del Tren de Alta Velocidad (TAV) no va a perjudicar al cauce fluvial ni a los bancos marisqueros de la ría de Arousa. Así lo mantiene el Estado central, y así lo transmite el subdelegado del Gobierno a los representantes de las cofradías arousanas.
Los informes que obran en poder el Ministerio de Fomento incluyen minuciosos estudios elaborados por expertos y científicos –incluidos los emitidos por las Universidades de Vigo y Barcelona– según los cuales la calidad del agua está garantizada gracias a las medidas preventivas puestas en marcha.
Así quedó puesto de manifiesto en la reunión mantenida ayer en Pontevedra, donde el subdelegado, Delfín Fernández Álvarez, quiso tranquilizar a los portavoces de los sectores productivos, entre los que se encontraban el presidente de los parquistas de Carril, José Luis Villanueva; el patrón mayor, Fernando Franco; su homólogo de Rianxo, Baltasar Rodríguez; y el presidente de la Federación Gallega de Cofradías, Benito González. Este último indicó tras la reunión de ayer que "si se mantienen los criterios preventivos actuales, y si seguimos adelante con las reuniones de seguimiento, actuando siempre con seriedad, los sectores productivos podemos sentirnos tranquilos".
Lo que hizo ayer el subdelegado "fue informarnos detalladamente de la situación actual y de cómo avanzan las obras –continúa el presidente de la Federación Gallega–, y según los estudios realizados parece que , al menos de momento, tanto el río como los bancos marisqueros gozan de buena salud y no se han visto afectados por los primeros trabajos realizados".
La conclusión, según Benito González, es que "los sectores productivos podemos estar tranquilos, aunque sin bajar nunca la guardia y velando para que sigan aplicándose todas las medidas preventivas anunciadas", tales como las barreras antiturbidez o la boyas y/o turbidímetros que, aguas abajo, vigilan cualquier posible afección en el Ulla.
A su vez, desde la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra manifiestan que tras los estudios técnicos llevados a cabo para determinar el posible impacto de las obras del viaducto sobre los bancos marisqueros "la conclusión a la que podemos llegar es que ese impacto va a ser nulo, de aquí que se garantice la calidad del río y de la producción marisquera de la ría".
El hecho de que se celebrara la reunión de ayer y que esté previsto mantener otros encuentros periódicamente, se debe a la ubicación estratégica del viaducto, que a lo largo de 1.620 metros va a cruzar el Ulla entre Abalo (Catoira) e Isorna (Rianxo). Aguas abajo se encuentran los conocidos como Os Lombos do Ulla, es decir, los bancos de libre marisqueo más importantes de Galicia. Y junto a ellos están los parques de cultivo de Carril y la desembocadura del río en la ría de Arousa, con lo que ésta también puede verse afectada en caso de detectarse problemas constructivos.
De ahí la importancia de las medidas preventivas adoptadas. Sin ir más lejos, cuando el Ministerio de Fomento adjudicó la construcción de este viaducto, con un presupuesto de 105 millones de euros, ya advirtió de que "en el diseño de la estructura se ha cuidado especialmente la integración en el entorno, buscando la transparencia y el equilibrio de formas en consonancia con la suavidad del paisaje".
Además, "con la distribución de las luces del viaducto se evita la afección a la vegetación de ribera, incluyéndose las medidas pertinentes para el control en todo momento de las aguas del río".
Al mismo tiempo, el Gobierno central señala que "se ha previsto la restauración paisajística del entorno, especialmente en el espacio natural de la laguna Pedras Miúdas, en Catoira".

Fuente: Faro de Vigo