La Federación de Cofradías alerta del riesgo que corre el marisqueo gallego

Benito González, patrón mayor de Cambados y presidente de la Federación Gallega de Cofradías, es consciente de que la aplicación de unos análisis de biotoxinas más restrictivos que los actuales "puede causar estragos en los bancos marisqueros y en flotas tan sensibles como la de vieira".
Hace estas consideraciones para dejar claro que los controles que pretende imponer la Comisión Europea no sólo van a afectar a los mejilloneros, pues cabe recordar que cuando las biotoxinas atacan a las rías también pueden obligar al cierre de zonas marisqueras, y se teme que esos cierres se disparen hasta límites inasumibles en caso de llevarse a cabo la propuesta europea.
"Hay que estar unidos y plantar cara a esta situación, incluso defendiendo la singularidad de las rías gallegas", declara Benito González.
En caso contrario, advierte el presidente de la Federación Gallega, "una vez más Galicia volverá a salir perjudicada por las decisiones de Europa y se estará causando un daño irreparable a miles de familias".
El cambadés lamenta que "cada vez se está cerrando más el grifo y ponen más y más limitaciones a nuestra actividad, por eso debemos hacer frente a este despropósito y evitar unos niveles de marea roja tan bajos y restrictivos como los que quieren aplicar, pues van a obligar a cerrar grandes zonas de marisqueo y van a dificultar muchísimo más la extracción de especies como la vieira".
Recuerda Benito González que, en su momento, "a causa de una tontería la flota tuvo que ver como se le prohibía capturar el relojito, y ahora tenemos que andar metidos en infinidad de procesos para recuperar aquella actividad, por eso debemos evitar que vuelva a suceder algo semejante".
El presidente destaca, como otros patrones consultados ayer, la importancia del documento remitido a la Comisión Europea para evitar los nuevos análisis, al igual que considera importante el esfuerzo que se está llevando a cabo actualmente en Galicia para hacer escuchar la voz de los productores y defender sus intereses ante las altas instancias europeas.

Fuente: Faro de Vigo