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AGRUPACIÓN PARQUISTAS DE CARRIL

Denuncian a la Cofradía de Carril al usar un desván para oficinas sin licencia municipal

La asociación Aproamar solicita al alcalde la paralización de la actividad laboral en el famoso "faiado"

 

La Asociación Profesional de Autónomos del Mar, Aproamar, ha enviado un escrito al Concello de Vilagarcía de Arousa en el que denuncia a la cofradía de pescadores "Santiago Apóstol" de Carril por haber dedicado la última planta del inmueble a oficinas, cuando según un informe urbanístico del propio Ayuntamiento esa planta debería tener uso de almacén y "no consta ninguna licencia de actividad o apertura de establecimiento, salvo error u omisión involuntario". 

 

Aproamar relata en su denuncia que en la planta +1 "se están realizando funciones de oficina por dos trabajadores que allí se encuentran asignados desde que a finales del año 2017 el patrón mayor de la cofradía de pescadores, José Luis Villanueva Vicente, decidió trasladarlos, rehabilitando dicha planta y cambiando el uso de almacén para emplearlo como oficina para hacer los servicios profesionales contratados hasta la actualidad". 

 

Así las cosas, el colectivo solicita al Concello vilagarciano que adopte "de modo urgente las medidas procedentes para el cumplimiento de la legalidad urbanística conforme a la Lei do Solo de Galicia y el Reglamento de Disciplina Urbanística, acordándose por el alcalde la paralización inmediata de la actividad laboral en la indicada instalación". 

 

La asociación considera que una de las medidas a tomar sería la incoación "de expedientes sancionadores y de reposición de la legalidad urbanística" y urge a los técnicos municipales a que comprueben las instalaciones y las obras realizadas en el almacén "dada la incompatibilidad de los usos previstos en la actualidad y la inexistencia de licencia de actividad". 

 

Juzgado

 

Cabe recordar que una de las trabajadoras que desempeña su trabajo en el desván es la bióloga, que llevó al Juzgado de lo Social al patrón mayor y a la cofradía de Carril por vulneración de derechos fundamentales. La Justicia dio la razón a la empleada, quien acaba de presentar un escrito en el pósito solicitando la ejecución de la sentencia.

  Fuente:Faro de Vigo

 

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