Villanueva reclama más controles sanitarios en la entrada de almeja foránea

El presidente de la agrupación de parquistas de Carril, José Luis Villanueva, asegura que son necesarios más controles sanitarios y de etiquetado de la almeja que procede del exterior. “Esos bivalvos no tienen en la mayoría de los casos la validez de una certificación sanitaria nacional”, indica.

El presidente de la Agrupación de Parquistas de Carril teme que se repita el caso de hace unos años, con la llegada de la campaña de Navidad. “Después de una tremenda riada, la almeja de Carril quedó arrasada, pero sin embargo había empresas que seguían vendiendo el bivalvo como si fuese de aquí y nadie hacía nada al respecto”, señala.

No corren buenos momentos para el sector y cada vez entran en el mercado nacional más almejas que no responden a los controles sanitarios a los que se someten los bivalvos gallegos, según Villanueva.

En este sentido, reclama una mayor vigilancia en las fronteras para, de este modo, evitar esta “competencia desleal y un perjuicio para el consumidor”.

“Si se ponen en las fronteras de Irún y comienzan a abrir expedientes se podría acabar con este problema”, asegura.

De hecho, España es un país consumidor potencial de marisco, pero el problema es que “para aquí todo el mundo trae, pero nadie lleva”. El papel de la Administración gallega resulta clave, según Villanueva, aunque reconoce que pueden existir presiones desde otros países europeos como Italia porque son un mercado importante del mejillón fresco gallego.

“No estoy en contra de que vengan otros productos del exterior, pero creo que es importante que respondan a unas garantías sanitarias. El mejillón gallego tiene una calidad que no tiene la almeja foránea”, dice.

Además, Villanueva apunta a la importancia de las características del transporte en este tipo de desplazamientos con productos alimentarios y que en muchos caoss no están adecuados.

La bajada en las ventas es una de las preocupaciones que siguen creciendo en el sector marisquero y para Villanueva una de las razones de este comportamiento en el mercado es, sin duda, la competencia “desleal” de este bivalvo.

De hecho, asegura que desde hace un par de meses varios parquistas de su agrupación no están extrayendo producto de sus viveros porque “ no quieren tirar su esfuerzo y su trabajo”. Sin embargo, asegura también que este tipo de comportamiento es una contradicción, ya que son conscientes de que favorecen la entrada de otro tipo de almeja para cubrir la necesidad de mercado.

“Es la pescadilla que se muerde la cola. Nosotros sujetamos las ventas mientras que otros se aprovechan. Lo peor es que la gente ya se está acostumbrando a ese sabor y esto es muy perjudicial”, dice.

El presidente de la Agrupación de Parquistas de Carril asegura que él simplemente pide que se establezcan “los mismos controles a la inversa”.

Fuente: Diario de Arousa