Mar apuesta por perseguir tanto al furtivo como al que adquiere los productos ilegales

La Consellería do Mar mantiene su intención de desplegar antes de que finalice la primera quincena de julio un plan integral de lucha contra el furtivismo que beneficie a todas las rías gallegas. Pero es que, además, pretende estrechar el cerco de tal forma que se controlen absolutamente todos los eslabones de la cadena, desde que el producto se encuentra en el mar hasta que llega al cliente final, pasando por su extracción y comercialización.
Esto es así porque se considera tan furtivo al que faena ilegalmente o extrae bivalvos mientras se baña en una playa, como al que adquiere esos productos a sabiendas de que son ilegales.
Y frenar esa práctica es algo que se pretende conseguir tanto intensificando la presencia policial y los medios materiales disponibles para vigilar las rías como tipificando el furtivismo como delito, de tal forma que actuar de forma ilegal salga más caro que una simple sanción administrativa.
Así lo considera la conselleira de Mar, Rosa Quintana, y así lo reiteró ayer en sede parlamentaria el director xeral de Ordenación e Xestión dos Recursos Mariños, Pablo Fernández Asensio, quien mostró la disposición de su departamento a "luchar de forma directa, integral y coordinada" contra los furtivos.
"Es tan furtiva la persona que baja a la playa" para extraer marisco sin autorización o en época de veda, "como aquella otra que compra ese producto o lo pone en el mercado o en un restaurante sin los debidos controles higiénico-sanitarios".
De este modo abunda el director xeral en los riesgos que el furtivismo entraña para los sectores productivos legalmente regulados, pero también deja caer la existencia de importantes riesgos para la salud pública en caso de consumo de determinados productos ilegales, que lógicamente no son sometidos a los controles que sí superan las especies extraídas por los cauces reglamentarios.
Y dicho esto insiste Pablo Fernández Asensio en que Mar va a endurecer tanto la vigilancia como el castigo, de ahí que se estén dando ya todos los pasos para lograr una modificación del Código Penal que permita contemplar al furtivismo como un delito, de tal forma que los reincidentes puedan ser castigados con firmeza "para que dejen de robar el futuro a miles de profesionales honrados".
Fue en la comisión parlamentaria de Pesca e Marisqueo donde el director xeral comprometió el trabajo de su consellería para "gestionar los recursos y ordenarlos con el fin de sostener a las economías marineras y mariscadoras de Galicia, en las que se integran alrededor de 25.000 personas".

Fuente: Faro de Vigo