DOCUMENTAL
Esta almeja sí es la buena
Hay preocupación y algo de fastidio entre los parquistas de Carril, herederos de la tradición centenaria del cultivo de la almeja. Un temor de que el concepto se banalice y acabe dando lugar a lo que le pasó a los pimientos de Padrón, que ahora se venden en grandes superficies comerciales con la denominación habitual, aunque disimulado en el envase se señale que vienen de África. Para reivindicar el origen y calidad de las almejas de la tierra, la agrupación de parquistas acaba de presentar un corto documental que repasa la historia y características singulares del marisco.
El trabajo, en el que participa el profesor de Historia Económica de la Universidade de Santiago Ángel Fernández González, recuerda los orígenes de la actividad, de la que hay referencias escritas ya en la ‘Descripción del Reyno de Galicia’ de Bartolomé de Molina, que data del siglo XVI, y que en el XIX se señalaba como peculiar por la característica distintiva de los carrileños de no limitarse a recolectar lo que daba la ría, sino cultivar para buscar el engorde.
Que el producto es bueno era conocido ya hace un siglo, cuando la almeja de Carril se vendía a precio de oro y el común la probaba solo en Cuaresma y otras fiestas de guardar. El primer tren de Galicia, la línea entre Carril y Cormes que a partir de 1873 gestionó el abuelo de Camilo José Cela a través de The West Galician Railway Company –‘A debés’, en la abreviatura fonética popular- aumentó la popularidad de un producto que se comercializó con éxito en el Franco compostelano.
Aquella práctica ha derivado en que hoy en día la almeja de Carril tenga por norma general hasta un 40% menos de colesterol y otro tanto más de rendimiento de carne que otras, según se deduce de un estudio encargado al departamento de Historia e Instituciones Económicas de la universidad santiaguesa. Los parquistas están molestos con la imposición de un tamaño mínimo para la almeja babosa que ven imposible cumplir haciendo lo que desde siempre vienen haciendo: doblar el espinazo y pasar el raño en las arenas entre el puerto y Cortegada. Con iniciativas como este documental, que vino precedido por una revista que ahonda en la cuestión, buscan sensibilizar al público.
Con unas 650 familias dependientes de esta actividad, el objetivo es claro. “Somos herederos de 500 años de tradición y nuestra aspiración es preservar nuestro oficio otros 500 más”, resumen al término del documental José Luis Villanueva, presidente de la agrupación.
Fuente:Victor Honorato-El País
EL DOCUMENTAL DE LOS PARQUISTAS DE CARRIL
Os parquistas de Carril promocionan a súa actividade a través dun video documental
Baixo o título Hecho a Mano. Historia de una Profesión, o que se pretende dar a coñecer é o duro traballo diario deste colectivo para dar cun dos productos máis codiciados da nosa gastronomía: a ameixa de Carril. O video foi presentado esta mañá.
A arte centenaria de sacar vida da area
Foi na Idade Media cando os habitantes de Carril caeron na conta da potencialidade que o seu mar tiña para a economía local e foi aí cando, de forma paseniña, se empezou a construír un oficio do que viven actualmente máis de 650 familias. Esa historia está agora reflexada nun documental que, baixo o título “Historia de una profesión” debulla os segredos de como se cultiva a mellor ameixa do mundo, a de Carril.
A peza audiovisual, realizada por Noemí Lois, conta as claves dun oficio que se fai “á man” e que, segundo a propia Agrupación de Parquistas, “constitúe a empresa con máis empuxe económico de Vilagarcía”.
Para aqueles que non o saben Carril foi un dos portos con maior pulo da Ría de Arousa. Conseguiu este papel grazas a ser principio ou fin, segundo se mire, da primeira liña de ferrocarril galega, a West Galicia. Este empuxe en infraestruturas axudou para que aquel marisco que se extraía da area entre Cortegada e a desembocadura do Ulla saíse hacia diferentes destinos converténdose nun produto estrela (para as clases máis acaudaladas) no período xustamente anterior á Guerra Civil.
Mexillóns, ostras e ameixas saían da area carrilexa con destino mesas de toda Galicia. Os primeiros descolgaríanse desta fórmula no ano 1950, data na que “como hongos”, as bateas empezaron a converterse en parte da paisaxe da Ría de Arousa. O mundo do mar caeu na conta entón que os mexillóns eran para as bateas e que o esforzo dos de a pé debía centrarse no cultivo da ostra e, sobre todo da ameixa.
A primeira legalización dos parques de cultivo chegaría no ano 1958. Foi entón cando se recoñeceu a existencia oficial de 611 parcelas. Unha división inusual e case única en Galicia, inda que non exclusiva.
As imaxes entrelázanse para contar os beneficios do produto estrela, a ameixa, da que o propio presidente da Agrupación de Parquistas sinala que “un estudio da Universidade demostra que a ameixa de Carril ten un 40% menos de colesterol que outras ameixas veciñas e un 42% máis de rendemento en carne”. Recalcou por activa e por pasiva que “todo o facemos a man”.
Na peza documental evitouse falar de conflitos abertos directamente coa Consellería aínda que a posteriori e trala proxección do cumental incidiuse na problemática existente no tema das tallas ou no decreto de regularización dos viveiros.
Na proxección estiveron presentes autoridades como o alcalde de Vilagarcía, Tomás Fole, e os membros da Mesa Local do Turismo que non dubidaron en suxerirlle ao alcalde a posibilidade de facer un proxecto conxunto no que se vendan e dean a coñecer todos os encantos turísticos da localidade.
Fuente:Diario de Arousa
Carril presume de almeja rica... y sana
Los parquistas elaboran un corto sobre el duro trabajo en los viveros entre Cortegada y A Concha - Villanueva dice que el producto carrilexo tiene un 40% menos de colesterol
No toda la almeja que se compra como de Carril ha crecido a los pies de Cortegada o en aguas de las playas de A Concha y Compostela. "La mayoría de lo que se paga es un fraude, no es almeja de Carril, no hay para todos", afirma el presidente de la agrupación de parquistas, José Luis Villanueva, que ayer presentó el documental "Hecho a mano. Historia de una profesión", un cortometraje que muestra la dureza del oficio y la historia de los parques carrilexos, donde se cultiva "la mejor almeja del mundo", pero no solo por su sabor. Resulta que tiene hasta un 40% menos de colesterol que otras.
Babosa, fina o japónica. Son los tres principales tipos de almeja que se cultivan en el millón de metros cuadrados que ocupan los viveros de Carril, casi únicos en España y en los que crece lo que los carrilexos consideran el mejor bivalvo del mundo. Por todos es conocida la fama de la que goza tanto dentro como fuera de nuestras fronteras la almeja de Carril. Pero este producto no solo presume de sabor, sino que también es muy saludable. El presidente de la Agrupación de Productores de Parques de Cultivo de Carril, José Luis Villanueva, asegura que según un estudio de expertos la almeja carrilexa "tiene hasta un 40% menos de colesterol que las cultivadas en otros lugares". "También tienen hasta un 42% más de rendimiento en carne", agregó.
Aparte de promocionar la calidad indiscutible de la almeja carrilexa, el documental elaborado por la agrupación de parquistas pretende, sobre todo, mostrar la cara más desconocida del producto, que no es otra que el trabajo de los productores y la historia de esta dura tarea que nació hace 500 años.
Aunque los primeros pasos para la legalización de parques se dieron en 1958 -un proceso que culminó en 1961 con 611 parcelas regularizadas-, la historia de esta profesión se remonta muchos más años atrás. La primera línea ferroviaria en Galicia, la West-Galicia entre Carril y Santiago, nacida en 1873, sirvió para que la comercialización de la almeja de Carril se introdujese en más mercados. Famosa es Ramona González, "la carrileña", que antaño decidió abrir un comercio de venta de marisco en la calle del Franco, en pleno casco histórico de Santiago. Fueron muchos los compostelanos que en el siglo XIX decidieron abrir tiendas para vender bivalvos en Carril, y también carrilexos que llevaron su producto a la capital gallega.
Los años previos a la Guerra Civil Española (1936-1939) la almeja carrilexa fue ganando peso en la mesa de los ciudadanos, aunque solo en ocasiones especiales, puesto que los precios eran prohibitivos para el común de los mortales.
En un principio el engorde de marisco en los parques que se extienden desde la emblemática isla de Cortegada hasta la playa de A Concha, pasando por A Compostela, abarcaba tanto almeja como mejillón, aunque la proliferación de bateas a partir de 1950 hizo desistir a los parquistas de cultivar este molusco para centrarse en la almeja.
Estos son solo algunas de las curiosidades que muestra el documental "Hecho a mano. Historia de una profesión" con el que la agrupación de parquistas que preside Villanueva pretende poner en valor "uno de los recursos socioeconómicos más importantes de Galicia". "Somos la primera empresa en términos económicos de Vilagarcía. De los 650 parquistas de Carril, más de 400 están en la agrupación", defendió José Luis Villanueva.
La finalidad de este cortometraje de 12 minutos es acercar al público "un oficio artesanal, cargado de tradición e historia, pero también pretende ser una herramienta que impulse el turismo en Vilagarcía de Arousa, mostrando su inconfundible escenario con la isla de Cortegada de fondo y combinándolo con una atractiva propuesta gastronómica, el producto estrella de esta localidad, las almejas de Carril".
El alcalde de Vilagarcía, por su parte, elogió la riqueza del trabajo audiovisual ayer proyectado ayer, tanto en contenido como en imágenes (tomadas en seis días no consecutivos desde tierra, mar y aire). "Muestra el pasado, presente y futuro de esta profesión", apuntó Tomás Fole.
El regidor insistió en la necesidad de que los propios vilagarcianos conozcan su tierra para poder promocionarla. "No es de recibo potenciar Cortegada si no vamos allí, tampoco es de recibo potenciar el Pazo de Rubiáns si el 90% de los vilagarcianos no lo han visitado", ejemplificó el primer edil, partidario del "origen-destino Santiago" para promocionar la capital arousana.
Uno de los mecanismos es la Mesa Local de Turismo creada y capitaneada por el Concello. Con todo, desde su primera reunión en junio no ha vuelto a trascender encuentro ninguno.
Acciones conjuntas en materia de turismo
El cortometraje "Hecho a mano. Historia de una profesión" se estrenó ayer a mediodía en la sede del Gato Negro en un pase al que asistieron autoridades como el alcalde de Vilagarcía, Tomás Fole, el concejal de Promoción Económica, Manuel Tarrío, o el patrón de la cofradía de Carril, Fernando Franco. También visionaron el documental la presidenta de Zona Aberta, Rocío Louzán, agentes turísticos como el ingeniero agrónomo del Pazo de Rubiáns, Guillermo Hermo, o representantes de la Autoridad Portuaria y miembros del sector pesquero, entre otros asistentes.
Aprovechando el encuentro y que el alcalde había hecho referencia en su discurso a la Mesa Local de Turismo (entidad creada en junio que no se ha vuelto a reunir desde entonces), el ingeniero del Pazo de Rubiáns Guillermo Hermo planteó a los allí presentes la posibiliad de elaborar un vide conjunto de los principales atractivos turísticos de Vilagarcía para promocionar todos juntos la ciudad. Pero el planteamiento cayó en saco roto y solo obtuvo largas.
Fuente:Faro de Vigo
Quinientos años con los pies metidos en el agua
El documental «Hecho a mano» recorre en doce minutos la historia de los parques de Carril
Bienvenidos a Carril, la cuna de las mejores almejas del mundo. Ese es el mensaje central de Hecho a mano. Historia de un oficio, un documental de doce minutos filmado por Noemí Lois para la Agrupación de Parquistas de Carril. El documental se estrenó ayer por partida doble. Por la mañana se mostró al ojo crítico de los integrantes de la mesa local de Turismo. Y por la tarde, se proyectó para todos aquellos que quisieron acercarse al Gato Negro de Carril.
La película fue rodada en verano, con un sol radiante, en unos días «nos que case se agradecía estar no mar», según señalaba José Luis Villanueva, el presidente de los parquistas. Aún así, las imágenes de los profesionales con las espaldas dobladas y con los raños en ristre ilustran la dureza del trabajo de los cultivadores de almeja. Un oficio que se vuelve más duro a medida que avanza el invierno, y el frío, y la lluvia.
El cultivo del mar arrancó en Carril hace mucho tiempo: quinientos años, según las cuentas que ha echado Ángel Fernández, un profesor del departamento de Historia e Instituciones Económicas de la USC que ha elaborado un estudio para los parquistas carrilexos. Su rostro sale en este documental, enmarcado por las casas de piedra de la Rúa do Franco, de Santiago. Una calle en la que algunos vecinos de Carril, pioneros y modernos, decidieron establecer sus negocios de venta de marisco. Ramona González, la carrileña, fue una de aquellas mujeres que abrió camino a las almejas de Carril y que contribuyó, también, a que O Franco, se haya convertido en una referencia gastronómica en toda Galicia.
Pero el mundo ha dado muchas vueltas desde los tiempos de Ramona la carrileña. Sin embargo, no ha cambiado tanto el oficio. «Somos herederos de quinientos años de tradición y queremos mantenerlo por quinientos años más, elevándolo sobre los problemas. Y lo haremos trabajando la marea de cada día», decía la voz de Villanueva para cerrar los doce minutos de documental. Y es que problemas le sobran al sector de los parquistas. En el reportaje se explica que el primer proceso de legalización de los viveros de cultivo de Carril se inició en 1958 y se cerró en 1961. De aquel proceso salieron un total de 611 parcelas que ahora llevan más de veinte años sumidas en un nuevo proceso de revisión. Las 650 familias que se nutren de estos parques de cultivo se encuentran, dice Villanueva, huérfanas de una seguridad jurídica que permita al sector avanzar hacia la consecución de marcas de calidad que protejan a la almeja de Carril de todas las imitaciones que le salen al paso.
Que son muchas y variadas. Bivalvos de todas las latitudes se cuelgan la etiqueta «de Carril» para tener suerte en su viaje por los mercados. Y eso es algo que los parquistas no quieren que pase, porque les hace daño. Por eso han decidido reivindicarse a sí mismos y a su producto, que bien lo vale. El documental presentado ayer es solo un primer paso en un camino que quieren que sea largo y próspero. Así que no descarten nuevas entregas audiovisuales que tengan a sus protagonistas con los pies mojados por el agua de Carril.
Al reivindicarse como colectivo, al poner su oficio ante las cámaras, al reclamar el protagonismo de la almeja, los parquistas han compuesto un gran vídeo promocional de Vilagarcía. Por eso ayer, los parquistas y la cofradía quisieron mostrar su vídeo a todos los que tienen algo que decir en el diseño de las estrategias promocionales de Vilagarcía: los integrantes de la mesa local de Turismo. De la presentación del documental surgió una idea: que, con las espectaculares imágenes que han reunido varios colectivos, se elabore un gran vídeo para «vender Vilagarcía». La materia prima ya está, solo hace falta que el Concello recoja el guante y la organice.
Fuente:La Voz de Galicia
HECHO A MANO, HISTORIA DE UNA PROFESIÓN
Los parquistas de Carril editan un documental sobre el oficio
Se presentará el día 28 en los locales del Gato Negro
La Agrupación de Productores Parques de Cultivo de Carril ha editado un cortometraje documental propio, que será presentado el 28 de noviembre a las 18.00 horas, en el centro cultural Gato Negro. Con este trabajo audiovisual, titulado «Hecho a mano. Historia de una profesión», la agrupación quiere cercar al público el oficio del productor de la Almeja de Carril y «ponerlo en valor como uno de los recursos socioeconómicos más importantes de Galicia».
Este cortometraje documental muestra, además, una nueva dimensión cultural y turística de esta profesión, con quinientos años de historia.
Fuente:La Voz de Galicia