Las cofradías estiman en 58.000 euros el coste de inicio de la actividad marisquera
La formación de la tripulación cuesta, según su informe, 2.300 euros y la embarcación alcanza los 35.000 euros -Es el primero de tres estudios sobre la viabilidad del sector
Las cofradías de pescadores arousanas anunciaron tras su reunión de hace dos semanas en Carril (Vilagarcía) que estaban elaborando un informe en tres partes para explicar las dificultades económicas que atraviesa el sector en los últimos años. La primera sección de este análisis fue presentada ayer y determina que para cualquier arousano que tenga intención de iniciarse en la actividad extractiva en una embarcación de dos tripulantes deberá pagar de inicio 58.539,43 euros.
Más de la mitad de ese presupuesto se lo lleva la adquisición de la nave, con un coste de 35.000 euros. Se trata de una embarcación de seis metros de eslora, 2,5 Gt. y 12 Cv. procedente de otra ría gallega y con capacidad para dos tripulantes (patrón y marinero).
Otra parte importante de esta estimación presupuestaria se la lleva, según el informe elaborado por las cofradías arousanas, el apartado de formación de la tripulación. Los dos cursos de marinero pescador tienen un coste de 550 euros, los de formación básica, 1.000, el de formación sanitaria, 500, las libretas marítimas, 82,42, y la expedición de titulaciones y tarjetas, 147.
Este análisis tiene en cuenta la escasez de cursos auspiciados por la Xunta de Galicia y que los centros oficiales se sitúan en Bueu, Vigo y Ribeira, por lo que los marineros que no residan en dichas localidades, deberán abonar desplazamientos y dietas. Así pues, el informe toma como referencia el coste de los cursos en centros privados.
La transmisión de los permisos de marisqueo y el expediente de autorización de cambio de puerto base suponen un pequeño gasto de 25,83 euros.
Por otra parte, las cofradías añaden el coste de abonar los honorarios notariales (157,5 euros), el impuesto de transmisiones patrimoniales, de 525 euros, el registro de la propiedad en el Mercantil, 471 euros, la inscripción en capitanía de la titularidad de la Hoja Asiento, 18 euros, y el cambio de certificados de conformidad, 72 euros. Junto con el coste de la embarcación, ya suman otros 36.243,59 euros.
El reconocimiento médico de los dos tripulantes, el botiquín del tipo "C", el certificado Marpol y la tasa de navegación, suman otros 334,5 euros.
Regularización y material
El material de salvamento añade otros 325, el seguro de responsabilidad civil, 90, el plan de prevención, 134,5, el mantenimiento de la embarcación, 300, la regularización suma otros 12.600 euros, el material de trabajo, 4.900 euros y la cuota de armador y tripulante, 900. La suma de estos conceptos son 19,656 euros.
Esta gran cantidad de gastos en diferentes conceptos, la mayoría trámites legales de todo tipo, suponen una carga para aquellos que deseen iniciar su actividad en el sector de la pesca y el marisqueo en la ría, según estiman las propias cofradías.
Por esta razón trabajan en otros dos informes complementarios que presentarán en las próximas semanas. El primero relata la rentabilidad actual de la actividad profesional y el segundo, hace acopio de la información del balance de ingresos y gastos en el período comprendido entre los años 2005 y 2015 en lo relacionado con las labores de pesca de bajura y marisqueo con embarcación en la ría de Arousa.
Todo comenzó con su malestar con la Consellería do Mar
La presentación pública de este primero de tres informes sobre la viabilidad del negocio extractivo en la ría de Arousa es un nuevo paso en las acciones reivindicativas que las cofradías de la región han anunciado recientemente y que tienen como finalidad recuperar el diálogo con la Consellería do Mar. Al ente presidido por Rosa Quintana le culpan de la precaria situación que dicen padecer todos los representantes de este colectivo, uno de los más importantes de Arousa.
Tras su encuentro en Carril, los representantes de las cofradías llegaron a afirmar que la Consellería estaba tratando de "arruinar" la ría y la acusaban de "menospreciar" y "ningunear" tanto a los mariscadores como a sus "legítimos representantes".
Asimismo, dicha situación les llevó a solicitar entonces a una reunión urgente con el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, para tratar de "agotar todas las vías de diálogo posible", ya que en caso de que "sigan sin hacernos caso" recurrirán a medidas de presión "más contundentes" y "más difíciles de controlar".
Entonces, las quejas se centraban principalmente en el marisqueo, señalando a la Xunta de Galicia y afirmando que "no se han solucionado problemas tan graves como el de la mortandad de bivalvos", pero tampoco "la creciente presencia de depredadores" y otros muchos problemas que requieren respuestas "inmediatas".
También afirmaban acerca de las ayudas por el paro del sector que " no quieren ser subvencionados, sino salir al mar para hacer nuestro trabajo y poder vivir dignamente".
Fuente:Faro de Vigo
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Francisco -